Plantas Que Curan
Crecí escuchando que la agüita de manzanilla era buena para el estómago, que poner hojas de eucaliptus en agua caliente y aspirar…
…ese olor era bueno para los bronquios o que poner a remojar ortiga y luego aplicarla en el pelo era bueno para evitar la caída del pelo.
Cosas de personas ignorantes dirán algunos, de gente de campo dirán otros. Quizá sea cierto, pero más cierto es que esas y otras cosas similares tienen una base real. De hecho la planta de ortiga se utiliza en productos cosméticos para estimular el crecimiento capilar.
La Farmacia del Mundo
Tal vez quienes critican el uso de hierbas o plantas no sepan que el Amazonas - esa gran selva que cada día sufre la tala indiscriminada de su vegetación o la quema de ella para reconvertir la tierra en predios agrícolas o zonas ganaderas - es considerada la gran “farmacia” del mundo por su enorme variedad de plantas. Las mismas que se utilizan en la industria farmacéutica para elaborar medicamentos. De hecho el Ministerio de Salud (Minsal) de Chile reconoce 103 Medicamentos Herbarios Tradicionales (se puede descargar desde minsal.cl).
Y es que cuando surge la enfermedad ya en alguna parte la naturaleza tiene la cura o al menos el alivio, solo hay que encontrarlo. Por ejemplo, en México hay un árbol llamado chechén que exuda una sabia que al entrar en contacto con la piel provoca ampollas y daños, pero siempre crece muy cerca de él otro árbol llamado chakáh que ayuda a aliviar las molestias y a sanar. Hay una antigua leyenda maya que cuenta que estos árboles eran dos hermanos muy opuestos entre sí y que se enamoraron de la misma mujer, el de carácter violento retó a un duelo al pacífico y ambos murieron. Pidieron clemencia a sus dioses para así poder ver de nuevo a su amada y renacieron como árboles, el rabioso como el peligroso chechén y el tranquilo y amable como el que cura las heridas que produce su hermano.
El poder curativo de las plantas
Más allá de la fábula, leyenda o imaginación las plantas tienen mucho que ofrecernos si lo queremos oír. Por ejemplo, la papaya contiene un elemento que se usa para combatir la inflamación en casos de amigdalitis o faringitis y la cala tiene un gran tallo cuyo jugo se usa para disminuir la hinchazón luego de un golpe o torcedura. ¿Cómo lo sé? Porque mi papá, un señor que ha vivido toda su vida en la ciudad, que usa chaqueta y corbata y que además respeta y quiere a la naturaleza, nos aplica esos “remedios” a la familia cuando algo nos pasa. No es chamán, ni hierbatero ni nada de eso. Solo alguien que sabe, como muchos otros, que en los cerros, campos, bosques y parques hay soluciones a muchos de nuestros malestares. Como los del estómago que se alivian con cedrón, la digestión lenta o el colon irritable con bailahuén o que la paté vaca ayuda a las personas con diabetes y regula la presión arterial.
La herbolaria es un conocimiento maravilloso dispuesto a ser compartido con quien se interne en su mundo. Menta, hojas de limonero, ruda, aloe, boldo, canelo, caléndula, matico, paico… ¿sigo?. Son muchas y como todo debe ser usado con prudencia y conocimiento ya que también su incorrecto uso puede afectarnos. El respeto también es importante porque en cada planta o árbol hay un ser que se ofrenda para ayudar a otro a recuperar su equilibrio.